Porto de Galinhas es una de las joyas ubicada al nordeste de Brasil, donde se puede disfrutar de idílicas playas, piscinas naturales, excelente gastronomía y un pueblo cálido y sencillo.
Ubicada en el Estado de Pernambuco, Porto de Galinhas fue elegida nuevamente como "La mejor playa de Brasil" por la revista Viagem e Turismo, como en otras 10 oportunidades.
Cuenta con una extensa costa de 4 kms con arena blanca y bañada por aguas cálidas y transparentes.
En el siglo XIX el pueblo se llamaba Porto Rico, un paraje donde desembarcaban y se comercializaban en forma clandestina esclavos provenientes de África para trabajar en las plantaciones de caña de azúcar. Para evadir los controles, los esclavos eran transportados escondidos debajo de las cajas de gallinas de Angola. La contraseña de los traficantes para anunciar su arribo a la costa era "Tem galinha nova no porto" (hay gallinas nuevas en el puerto), y de allí el origen de su particular nombre actual.
Porto de Galinhas cuenta con sol durante casi todo el año, frondosos árboles de palma y extensas franjas de arena blanca.
Las playas mas alejadas son ideales para relajarse y contemplar la belleza de este entorno único, como las playas de Camboa, Muro Alto, Cupe, Serrambi o Toquinho.
A 8 kms de Galinhas, encontramos Maracaípe que es un lugar ideal para los surfistas y amantes de los deportes acuáticos. Con paisajes llenos de cocoteros y tranquilas posadas.
Entre los paseos, podemos mencionar la visita al Proyecto Hippocampus que se dedica al cultivo y conservación de los caballitos de mar de Brasil hasta avistajes de nidos de tortugas marinas.
Hay que conocer el imponente Baobab, un árbol monumental de 400 años y un tronco de 4,5 m de diámetro, y realizar un paseo en jeep por la playa de Muro Alto.
Se puede hacer un recorrido por las plantaciones de caña de azúcar, para conocer la vida campesina.
Nada mejor que relajarse, haciendo un paseo en balsa a las piscinas naturales en la Villa de los Pescadores.