Serían necesarios muchos meses para recorrer profundamente las 65 islas que conforman la bahía, pero con un paseo en barco es suficiente para ver las más significativas y otras conocerlas de lejos.
La idea es hacer un paseo de día entero a bordo, tomar sol en las reposeras de la cubierta, almorzar y tomar una caipirinha.
Las embarcaciones cuentan en la parte inferior con cómodas colchonetas donde se puede descansar a la sombra.
Estos viajes suelen incluir dos paradas para bucear o nadar hasta las islas, o los más cómodos, pueden subirse a una lanchita para llegar a tierra firme.
Otra excursion que se puede hacer en Paraty es un viajecito en jeep por la selva y conociendo las destilerías de cachaça, donde el aroma de la caña de azúcar recién procesada puede marear a los más sensibles y tentar a los amantes de esta bebida típica de Brasil.
En la selva se puede comer en un restaurante que tiene la particularidad que todas las mesas están al aire libre, distribuidas en un gran deck de forma circular, dando una sensación de estar comiendo entre los árboles.
Como llegar a Paraty
Está ubicada a mitad de camino entre Río de Janeiro y San Pablo. Se llega por ruta, por barco y por aire.
Más info de Río de Janeiro.