Camboriú es una ciudad llena de comercios, hoteles, restaurantes, con una amplia oferta de entretenimientos callejeros, cine, teatros.
Es una de las ciudades balnearias más populares de Brasil, que esperar la llegada de los turistas que la eligen año a año.
Esta ciudad que surge como una herradura natural entre su morro y el río, se destaca por la atención cordial y amable.
Con un teleférico, desde la costa se puede llevar al morro, pasando sobre el cauce de agua dulce que da nombre a la ciudad.
La ciudad fué fundada en la década del ’60, cuando el gobierno lanzó urbanísticamente otros grandes destinos como Belo Horizonte y Goiania.
La primer playa que se visita, es la playa céntrica que posee un largo muelle hacia la mar, donde los turistas se toman fotos, entre tantos pescadores.
En lancha se puede llevar a Ilha das Cabras, y al Morro das Pedras Brancas y Morro da Cruz, son perfectos miradores de sus luces nocturnas.
Otras playas de la Costa Brava, promocionadas por su lejanía y tranquilidad, son Laranjeiras, Taquaras, Taquarinhas, Estaleiro, Estaleirinho, Mata do Camboriú y Praia do Pino.
Como en toda la zona, la cocina de Camboriú se destaca por sus platos de especies marinas recogidas muy cerca y consumidas bien frescas. Es posible almorzar y cenar en hoteles, restaurantes o paradores los mejores mejillones, langostinos, camarones y ostras gratinadas en su concha, acompañados por la tradicional caipirinha y tragos con frutas frescas como el maracuyá.
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