La ciudad de Ouro Preto es una vieja vieja localidad minera ubicada entre sierras, con pendientes pronunciadas, techos de tejas naranjas y calles adoquinadas.
Se encuentra a 100 kms de Belo Horizonte, hacia el sur en el camino a Río de Janeiro.
Ouro Preto era uno de los puntos más ricos de la región en el siglo XVIII, ya que desde aquí partía la mayoría de las piedras preciosas y los metales que cruzaban el Atlántico.
El legado portugues, se puede ver en las 13 iglesias que esconden miles de historias y secretos que conectan esta región con Europa.
A 10 kilómetros se encuentra Mariana, una localidad donde se puede visitar la mina de oro Passagem, que funcionó entre los años 1819 y 1954. Recién en el año 1985 se reabrieron los túneles para fines turísticos.
La mina tiene 30 kms de túneles y abarca una superficie bajo tierra de 11 km2.
Los turistas pueden recorrer tan solo 315 metros, donde se respira humerdad y se puede encontrar con un clásico carro minero del año 1883.
La humedad se mezcla con el olor del abandono que se siente a medida que se avanza por los angostos pasillos, las paredes rugosas con las marcas que dejaron los explosivos hace décadas.
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